Medio Limón
Capitulo dos.
El amigo del hijo de la sirvienta
Mike contemplaba a
Luke desayunar tranquilamente mientras en su cabeza rondaba la espinita de la
duda, aunque quería aparentar que en realidad no le importaba.
-¿Qué haremos hoy, pinky?
-¡No Mikey, por
favoooor! - replicó el menor - ayer ya me sonsacaste lo suficiente, y hoy me
obligaste a madrugar.
Mike sonrió
mientras negaba con la cabeza.
-Por favor, Luke.
Te levantaste hace diez minutos y ya pasa de la una de la tarde.
-Sí, bueno, el
dormir ocho horas hace que tengas la piel suave y tersa - sonrió, mientras comía
más de su desayuno.
El ojiverde rodó
los ojos.
-Me gustabas más de
rubio, ¿Por qué quieres ser pelirrojo? Los rubios somos más sexys – jugueteó
con sus cejas.
-Me enfadé del
rubio natural – se encogió de hombros - además, así no me reconocen.
Luke le sonrió.
-¿El hijo de la
sirvienta desayuna en su habitación? - soltó Mike después de varios segundos.
-Ashton no es hijo
de la sirvienta - Luke arrugó la nariz.
-Entonces por qué
me has dicho que lo es.
-Yo no dije tal
cosa - Luke sacudió su cabeza.
-Lo has hecho - Mike
le robó un pedazo de fruta de su plato - hace tiempo.
-El otro chico, Scott.
Ese es el hijo de la... de Molly – se corrigió – y el término es “ama de
llaves”.
-Estaban juntos
cuando lo señalaste, ¿hace amistad con los del servicio? - Mike arrugó la
nariz.
-Nunca dije que
fuera un chico normal - se encogió de hombros.
-Su mamá... ¿Era
igual? - Mike sabía que estaba tomando un camino peligroso en esa conversación,
pero tenía que hacerlo.
-Ella era muy
dulce... y bonita - Luke bajó la mirada.
Mike sabía que la
madre de Luke había muerto cuando su amigo era muy pequeño. Su padre con el
pasar del tiempo se involucró con un par de mujeres más hasta que conoció a la
madre de Ashton. De eso cinco años atrás. Su unión fue demasiado escandalosa.
Ambos adultos eran reconocidos por su fortuna y poder entre la sociedad. Eran reconocidos
como el matrimonio golden y sus hijos
como los chicos de oro, ya que en
automático encabezaron la lista de los 20 jóvenes más ricos y poderosos del
continente.
-Ya sé lo que haremos
hoy, pinky - Mike llamó su atención.
-No quiero salir
Mikey, ¡no quiero que me secuestren! – suplicó. No otra vez…
-Luke, estamos de
vacaciones tenemos que aprovechar estos tres meses - Mike se levantó y comenzó
a caminar de un lado a otro frente al rubio – al quedarme contigo en todas las
vacaciones me prometiste diversión.
-Podemos
divertirnos sin salir de casa – señaló.
-¿Y por qué el hijo
de la sirvienta si puede salir?
-¡¿Qué?! ¡¿Ashton salió?!
– Luke se levantó rápidamente - ¡No puede salir!
-Sospecho que se
sale tooodos los días - musitó el
teñido.
-¡No puede hacer
tal cosa!
-¿Luke...? -
Michael comenzaba a preocuparse por su amigo, algo no andaba bien. No era
normal que se exaltara de esa manera.
-Si él sale, lo
descubrirán y llegarán a mí, ¡no quiero ser secuestrado! - el rubio comenzó a
comerse las uñas.
-Tranquilo, Luke.
Estas a salvo aquí en casa con Francis y conmigo protegiéndote - Mike le
sonrió.
-Cierto – se
tranquilizó - ¿Qué haremos hoy? ¿Nos quedaremos en casa, verdad?
-Hoy sí - Mike
aseguró, escudriñándolo con la mirada.
[...]
Ashton bajaba por
la pared sujetándose fuertemente de una sábana que se deslizaba desde su
habitación hasta el suelo.
-¿Por qué insistes
en salir de tu habitación por la ventana? - Calum no entendía esa acción de su
amigo; desde que se mudó a esa mansión, Ashton siempre ha salido de esa manera
de su habitación.
-¡Demonios, me
olvide del celular! - Ashton se golpeó la frente, en cuanto tocó el piso.
-No se te ocurra
subir por ahí, la puerta está a menos de tres metros. Hazle uso – ordenó el
moreno.
-De acuerdo - el
castaño rodó los ojos, solo esperaba que Francis no estuviera cerca.
[...]
-Podemos decirle a
Molly que nos haga palomitas y una pizza. Ponemos la película en la sala de
proyección y así podemos sentir que estamos en el cine - Luke sonrió. Mike alzó
una ceja, dejando de picar fruta. Se habían terminado las del desayuno y el
quedó con ganas de más.
-¿Y si mejor vamos
al cine? - Mike sugirió, con cuchillo en mano.
-Pero Mike, tú me
prometiste no salir de casa - Luke se quejó.
-Bueno, está bien,
ve por la película o lo que sea y...
Luke lo siguió con
la mirada, su amigo dejó de hablar y se dirigió hacia la salida, aún con el
cuchillo en la mano.
-¿Mike...?
El aludido caminó
hacia la recepción de la mansión, había escuchado voces y estaba seguro que
ninguna era del hijo de la sirvienta. Y entonces lo vio. Había un muchacho
delgado y moreno, muy, demasiado
cerca, de la repisa de algunos portarretratos tallados en oro de la familia
Hemmings-Irwin.
-Más te vale que no
toques eso - la hoja del cuchillo hizo que a Calum le diera escalofríos.
-De acuerdo, amigo,
yo...
-Shh, en primer
lugar, no soy tu amigo y en segundo...
Calum se giró
lentamente, Mike seguía apuntándolo con el cuchillo.
-¿Quién eres? Tú no
vives aquí - Calum cuestionó.
-El que hace las
preguntas aquí soy yo - acortó el teñido.
-¡Qué demonios estás
haciendo! - la voz de Ashton resonó en la recepción. Llegó hasta con Mike y de
un manotazo hizo que el cuchillo cayera al suelo - ¡¿Estás loco?!
-¿Qué haces aquí? –
Mike frunció el ceño.
-Vivo aquí y
agradecería que no agredieras a mis amigos - musitó, fulminándolo con la mirada.
-Creí que había
ordenado que no entraras en todo el día.
Eso fue demasiado
para Ashton, su paciencia tenía un límite y Mike lo había rebasado desde la
noche anterior, con creces. Se abalanzó hacia él y comenzaron a forcejear.
-¡No otra vez! -
Luke rodó los ojos al llegar hasta con ellos - ¡Mike! ¡Por favor, arruinas la
alfombra!
-¡Francis! - el
teñido gritó cuando se vio acorralado.
Unas enormes manos
jalaron de Ashton, separándolo así de Mike.
-¿Qué...?
-Llévatelo, lejos
de aquí – ordenó, jadeante.
-¡Bájame! - el
guardaespaldas no lo escuchó, lo acomodó en sus hombros, otra vez - ¡Ni
siquiera trabajas para él! - nada de lo que dijera haría que lo bajara.
Francis se dirigió
hacia el jardín trasero con Ashton en sus hombros y con Calum yendo detrás de él.
-Mike... - Luke
llamó, ayudándolo a levantar.
-Dime amigo.
-El cuchillo ha
cortado la alfombra - se quejó.
-Puedes comprar
otra - rodó los ojos.
-¿Mike?
-¿Si?
-No puedes usar a
Francis para beneficio propio.
-Ya lo hice –
sonrió de lado.
-No lo uses en
Ashton. Él es muy cruel.
Luke se dirigió
nuevamente hacia la cocina. Mike lo siguió con la mirada, preguntándose
internamente a quién se refería con cruel.
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